La capital de Chile, que cuenta con 13 sitios y una demanda anual de 15 MW en promedio, destaca por su infraestructura tecnológica, conectividad y estabilidad institucional, destacó el análisis elaborado por la compañía de servicios inmobiliarios Cushman & Wakefield.
Chile continúa posicionándose como un Hub Digital en América Latina, prueba de ello es la gran cantidad de empresas tecnológicas extranjeras que se han instalado en el país, con el objetivo de proveer asistencia de manera local, así como exportar sus servicios al exterior.
Amazon, Google, Huawei y Oracle son solo algunas de una larga lista de compañías que han instalado sus sitios en este lado del mundo, y gran parte de ellas se han volcado a ciudades que tienen características que las posicionan como hubs tecnológicos.
Los centros de datos se han convertido en una gran solución para el almacenamiento de información, más allá del peso o la cantidad de datos que generen las empresas. América Latina ha experimentado un salto importante en los últimos años en su uso, sobre todo luego de la pandemia.
De acuerdo a un análisis elaborado por la compañía de servicios inmobiliarios Cushman & Wakefield, que estudió el boom de los data center y su relación con la geografía y economía de los países, Santiago (Chile) y São Paulo (Brasil), son las ciudades más atractivas para el aterrizaje de este tipo de infraestructura.
São Paulo, el principal centro financiero de Brasil, destaca en primer lugar por tener el mercado de centros de datos más avanzado de Sudamérica, con 42 espacios físicos destinados al almacenamiento de grandes volúmenes de datos, con una capacidad total de 299 MW.
El atractivo no solo responde a su posición estratégica como polo económico, sino que también se debe a su avanzada infraestructura de telecomunicaciones y la conectividad de fibra óptica, señaló en un comunicado Sebastián Solís, Valuation & Advisory Manager de la compañía consultora.
A esa urbe le sigue la también brasileña, Campinas, que concentra 13 instalaciones y una capacidad de 132,96 MW.
Con igual número de sitios construidos a la fecha está la capital chilena -la número 50 a nivel global-, con una demanda anual de 15 MW en promedio.
“Desde 2016, la demanda por este mercado ha ido en sostenido aumento, de la mano con importantes avances en infraestructura de conectividad geográfica y el desarrollo de energía eléctrica para el funcionamiento eficiente de los centros de datos”, explicó el ejecutivo.
Aunque también habría otro factor en la ecuación: la estabilidad institucional del país. “Esto lo posiciona como uno de los mercados de centros de datos más avanzados y atractivos de la región”, dijo Solís.
Solís señaló que con el creciente apetito de empresas tecnológicas buscando almacenar y procesar datos, se espera que el desarrollo de centros de datos en América del Sur continúe creciendo en los próximos años.
“Los data centers son inversiones a largo plazo, 30 años o más, que han mostrado un comportamiento bastante estable en los últimos años. Hemos observado que en general los proyectos se construyen en etapas y se van expandiendo según la demanda de los clientes o el mercado”, remató.
Para saber más sobre el sector tecnológico en Chile y conocer las oportunidades de negocio que el país ofrece, revisa el siguiente artículo.
Fuente: Diario Financiero