El mundo cada año está demandando consumir alimentos de mejor calidad, tanto frescos como congelados, y esto representa una oportunidad de negocios para las empresas de refrigeración en un país con una industria alimentaria líder y sofisticada como Chile.
El país es reconocido como un importante actor en el sector a nivel global. En los últimos 10 años, las exportaciones de alimentos han crecido en torno al 25%, con retornos por US$ 21.428 millones durante 2023, y donde destacan productos como fruta, salmones, jureles y vinos.
El alza en la demanda por consumir alimentos de mejor calidad, tanto frescos como congelados, presenta una oportunidad de negocios para las empresas de refrigeración, considerando que el uso de equipos frigoríficos y congeladores es clave para la preservación de los alimentos y su calidad nutricional.
Operadores logísticos de frío y proveedores de tecnologías ligadas a este segmento de negocio estiman que, de cara al futuro próximo, la oferta de almacenamiento, transporte y tecnologías para la logística de alimentos congelados y refrigerados en Chile seguirá creciendo.
Una de las principales razones para esto es que, si bien Chile cuenta con una red de puntos de entrada y de salida bien estructurada en todo el país, la ausencia de puertos e infraestructura en importantes regiones agrícolas como O’Higgins y Maule abren oportunidades para el desarrollo logístico de cadenas de frío que permitan optimizar los procesos para la distribución de alimentos y potencial exportación de los mismos, manteniendo de esta forma altos estándares de calidad.
¿Cuáles son los principales impulsores para el desarrollo de infraestructura de frío en Chile?:
- El aumento sostenido del consumo de alimentos frescos y refrigerados en el mundo, con tasas de crecimiento anual compuesto que superan el 4%.
- El aumento del consumo de alimentos frescos y refrigerados en Chile.
- El crecimiento sostenido de la producción y exportación de alimentos frescos y refrigerados desde Chile.
- La posición de Chile como proveedor de alimentos para el mundo, con 34 Acuerdos Económico-Comerciales vigentes que integran al país con 65 economías, alcanzando el 88% del PIB mundial.
- Los importantes planes de expansión de los principales puertos marítimos de Chile.
- El déficit relativo de infraestructura de frío en algunas regiones productivas del país.
Nuevas inversiones
Ante este panorama, no son pocas las empresas que han anunciado nuevas inversiones en Chile en infraestructura en frío. En enero de este año, la sociedad Medlog Coldstore Chile (ligada a la gigante multinacional MSC Mediterranean Shipping Company), anunció que proyecta levantar un nuevo frigorífico en el Parque Industrial Coronel, en la Región del Biobío, con una inversión estimada de US$ 23 millones; mientras que Emergent Cold (EE.UU), reveló en febrero un agresivo plan de expansión en sector de refrigeración en Chile, con una inversión de US$ 500 millones a 2026. Asimismo, en marzo de este año la peruana Ransa concretó exitosamente la adquisición de Loginsa, uno de los 10 principales operadores logísticos de Chile.
Para el jefe de la División de Promoción de InvestChile, Salvatore Di Giovanni, el aumento del consumo de alimentos frescos y refrigerados a nivel interno es sólo una de las razones que hacen a Chile un país atractivo para el desarrollo de infraestructura en frío. “La tendencia global por acceder a alimentos inocuos, de mejor calidad nutricional y organoléptica, además de la orientación exportadora productiva de Chile abren oportunidades para abastecer a los mercados globales desde Chile creando oportunidades tanto para la producción de alimentos, como para el desarrollo de la cadena logística necesaria para lograr los más altos estándares de cara al consumidor, optimizando la cadena de suministro”, sostuvo.