El efervescente ecosistema de emprendimiento local, los tratados comerciales internacionales, los programas de financiamiento y el desarrollado nivel tecnológico del país sudamericano son las principales razones que atraen inversiones extranjeras a Chile.
Mientras muchos emprendedores chilenos están dando sus primeros pasos fuera del país, también existe un creciente flujo de inversión extranjera en el sentido contrario: startups internacionales que ven en Chile un mercado atractivo para ofrecer sus servicios.
“Nuestro país cuenta con una infraestructura digital y tecnológica adecuada y con altos niveles de bancarización para que los emprendimientos de base tecnológica puedan desarrollar sus soluciones”, explica Claudio Barahona, partner del fondo de capital de riesgo latinoamericano Alaya Capital. “En América Latina, probablemente es el país de mayor infraestructura financiera y tecnológica, lo que hace que seamos un mercado muy atractivo para startups digitales que hacen negocios. En eso estamos mejor que México e incluso Brasil”, añade.
Para Barahona el tamaño pequeño de nuestro mercado no necesariamente es algo que juegue en contra. Combinado con los factores antes señalados, es una condición que permite a las startups probar su modelo de negocios. “En Chile se puede pivotear rápido; así se puede probar un producto en mercado latinoamericano centrado principalmente en una sola ciudad. Por esto, las startups españolas, por ejemplo, prefieren abrir primero en Chile, para ver cómo reacciona el mercado y después de seis meses abrir operaciones que requieren más inversión en países como Colombia, México o Brasil”, explica.
El ejecutivo también destaca el mayor desarrollo del ecosistema local de venture capital, comparado con la región: “Claramente, Start-Up Chile marcó un punto de inflexión muy importante, porque mucha gente vino a Chile específicamente por este programa. Pero también tenemos un montón de incubadoras y más de 20 fondos de venture capital. Eso es más de lo que hay en Colombia, Perú y Argentina”.
Beatriz Herrera, coordinadora de Redes Internacionales y ejecutiva de Promoción de Inversiones de InvestChile, organismo público que promueve a Chile como destino de inversión extranjera directa, afirma que el país es atractivo por las startups por varias razones: “Primero, porque no solo pueden acceder al mercado local sino también al regional, gracias a nuestros acuerdos de libre comercio, que les dan un acceso en condiciones ventajosas al 88% del PIB mundial, además de contar con 33 acuerdos de doble tributación. En segundo lugar, Chile cuenta con una infraestructura digital privilegiada. De acuerdo al Gartner IT Market Data Book (2021), nuestro país lidera América Latina en términos de gasto en tecnologías de la información y es la economía donde el sector de tecnologías de la información creció con mayor velocidad el último año. Y tercero, Chile es un país de early adopters, lo que convierte a nuestro mercado abierto al mundo y pequeña población en una excelente opción para probar nuevos modelos de negocios, que luego pueden ser fácilmente replicables en la región”.
Herrera agrega que Chile se está posicionando como un polo de innovación en la región porque cuenta con profesionales altamente calificados y debido que no hay requisitos adicionales ni tratamiento preferencial para empresas foráneas que abren sus operaciones en nuestro país, “el 100% de una compañía creada en Chile puede ser de propiedad extranjera, hay libre flujo de capital y utilidades, con una estructura tributaria sencilla y facilidad para la creación de empresas”.
Estas razones llevaron a la Universidad de Cambridge a elegir nuestro país como filial regional para establecer Cambridge Business Association (CBA), cuyo principal objetivo es ser un puente comercial entre Silicon Fen (polo de innovación de Europa con Oxford y Cambridge) y América Latina (a través de Chile).
Guillermo Ramírez, director de Cambridge para América Latina, dice que les llamó la atención el desarrollo que el país ha tenido en cuanto a proyectos innovadores, debido al ecosistema impulsado por instituciones públicas como Corfo y Start-Up Chile con interesantes programas de financiamiento, además de la iniciativa privada que ha potenciado el desarrollo de emprendimientos tecnológicos.
“Creemos firmemente en el potencial innovador de Chile, por lo que, tanto desde el Cambridge Business Association (CBA) como desde el primer fondo de inversión de riesgo británico en operar en Chile, Oxbridge Capital Partner, hemos optado por invertir en Chile para potenciar el desarrollo de sistemas localmente, generación de empleos y transferencia tecnológica (...). Sabemos que muchos otros venture capitalist y family offices a nivel mundial nos están mirando constantemente como país, por lo que tenemos que dar las señales adecuadas, con reglas del juego claras y predecibles”, afirma Ramírez.
En cuanto a las condiciones que nuestro país entrega a startups internacionales para que puedan expandir sus operaciones, Ramírez señala: “Chile cuenta con una serie de tratados comerciales internacionales muy beneficiosos para cualquier emprendedor que desee exportar productos o servicios a mercados desarrollados con tasas preferentes. Otra variable muy interesante a considerar, según la de Subtel, el 85% de los chilenos son usuarios de internet, cifra similar a la de los países OCDE, lo que permite conectarse con el mundo desde cualquier parte del país con relativa facilidad”.
La startup estadounidense que ofrece una plataforma de delivery de productos de supermercados y farmacias abrió sus operaciones en Chile hace unas semanas. Gonzalo Pozo, cofundador y CEO en Sudamérica, explica la decisión: “Chile es clave y Santiago es una ciudad de América del Sur que marca un punto de inflexión. Tiene todo lo que nuestro negocio busca: un retail muy desarrollado, con gran cantidad de productos; la población está digitalizada desde hace mucho tiempo y es entusiasta de los servicios digitales. Además, es un país que se ha destacado en las últimas décadas por mantener una situación económica estable”.
La plataforma española de servicios financieros abrió sus operaciones en Chile a inicios de este año y también cuenta con oficinas en México y Perú. “Chile presenta un mercado atractivo dado el explosivo aumento del uso de aplicaciones digitales para transporte, comida, última milla y logística, entre otros. Por otra parte, este último tiempo, Chile ha acogido una gran cantidad de inmigrantes, que en su mayoría están excluidos del sistema financiero. Lana viene a apoyar desde su expertise a estos segmentos: trabajadores de aplicación y migrantes que buscan nuevas oportunidades. Por estas razones, creemos que podemos desarrollar una startup exitosa en el ambiente local”, explica Álvaro Jara, cofundador y gerente en Chile de Lana.
La escuela intensiva de programación francesa llegó a Chile este año y tiene operaciones en Brasil, Argentina, México y Perú. “Dadas las políticas nacionales de Chile de fomento y apoyo en áreas digitales y tecnológicas y el reconocimiento internacional de su ecosistema emprendedor, Le Wagon ha decidido posicionar su hub de habla hispana en Chile con el apoyo de InvestChile. Chile tiene dos factores fundamentales que lo hacen muy atractivo. Primero, el apoyo público a la transformación digital de las personas y empresas con apoyo a programas de entrenamiento en tecnologías digitales, y con políticas públicas (...). Segundo, el ecosistema emprendedor, del cual surgen, además de múltiples startups, los famosos unicornios. Esto nos habla de la gran capacidad de los chilenos para desarrollar emprendimientos que agreguen valor a personas y empresas, lo cual genera una demanda de talento calificado en tecnologías digitales para poder desarrollar empresas de clase mundial”, afirma Sebastián Buffo Sempé, cofundador de Le Wagon en Latinoamérica.
La startup estadounidense que ofrece un software antiplagio para las universidades, llegó a Chile hace cinco años y tiene presencia en 140 países del mundo. “En Chile se da un escenario muy interesante para una edtech como Turnitin, enfocada en garantizar la integridad académica; es un país reconocido por contar con algunas de las universidades más prestigiosas de la región, y el valor de la integridad académica está siendo cada vez más importante para inspirar a los demás países de Latinoamérica. Esto, sumado a que muchas universidades del país se han abierto a la modalidad de enseñanza en línea, híbrida y al uso de herramientas tecnológicas en el proceso de aprendizaje incluso antes de la pandemia”, afirma Leonardo Ferreira, gerente de marketing para América Latina de Turnitin.
La startup brasileña que ofrece consultas psicológicas y terapias de salud mental online, abrió sus operaciones en Chile hace cuatro años y tiene presencia en 12 países de Latinoamérica. “Chile tiene una gran estabilidad económica y es donde se maneja la mejor política para empresas digitales en términos de legislación. Al mismo tiempo, tiene serios problemas de atención de salud mental. Hace unos meses salió como el segundo país en cuanto al empeoramiento de salud mental y si bien esto es algo cultural, nos gustan los desafíos y buscamos democratizar el acceso a la psicoterapia. También, el sistema de salud de Chile es muy interesante para nosotros, por algo contamos con un acuerdo con Fonasa, donde por tan sólo $9.960 (unos US$13) las personas pueden agendar su sesión con un psicólogo”, dice Braulio Bonoto, CEO de la startup.
La startup originaria de Estados Unidos, que ofrece un software online para la edición de videos, abrió sus operaciones en Chile el año pasado y tiene presencia actualmente en Estados Unidos, Canadá, Nueva Zelanda, Singapur y Europa. “Los cambios en la forma que se está creando y consumiendo el entretenimiento en Chile han sido muy importantes para nosotros. Parte de nuestros clientes son agencias de publicidad, productoras y realizadores audiovisuales, pero también empresas y creadores con marcas independientes que necesitan crear contenido para sus redes y canales. El mercado chileno ha cambiado mucho con respecto a cómo se genera este contenido”, afirma Cristóbal Valenzuela, su co-fundador y CEO.
La plataforma estadounidense que ofrece tecnologías para que las empresas comercien a través de las aplicaciones de mensajería, abrió sus operaciones en Chile el año pasado y tiene actualmente presencia en Estados Unidos, Latinoamérica, India y el Sudeste Asiático. Karla Berman, vicepresidenta de Ventas de la compañía, afirma: “Los altos índices de penetración móvil del país hacen que Chile sea un mercado de gran interés e importancia para nosotros. Actualmente, en Chile hay más conexiones móviles que personas: 54 millones a septiembre de 2020. De igual forma, hay una altísima penetración del internet móvil lo cual hace que el comercio en dispositivos celulares tenga un enorme potencial. Por todo esto, es un país donde hay una alta oportunidad para que las empresas adopten aplicaciones de mensajería como WhatsApp como canal de negocios”.
Para saber más sobre emprendimiento e inversión extranjera en Chile, revisa el siguiente artículo.
Fuente: El Mercurio