La compañía de retail estadounidense es el tercer empleador del país, y gracias a sus medidas de inclusión e igualdad, actualmente el 54% de sus trabajadores son mujeres.
La cadena de supermercados estadounidense Walmart tiene un compromiso con generar impactos relevantes en la sociedad y disminuir las brechas de género existentes, dado que es el tercer generador de empleos en Chile.
Sus cifras van por buen camino, ya que actualmente el 54% de sus trabajadores son mujeres, lo que equivale a 22.220 empleadas, mientras que el 44% de las jefaturas, subgerencias y gerencias son desempeñadas por mujeres.
De acuerdo a Miguel Ángel Ruiz, vicepresidente de Personas de Walmart Chile, la diversidad e inclusión son conceptos estratégicos en la forma de hacer negocios en la compañía.
«Sabemos que valorar nuestras diferencias nos ha permitido contar con equipos más creativos y entender y atender de mejor forma a nuestros clientes. Hoy no basta con ser una importante fuente laboral. Las empresas tenemos una gran responsabilidad, que es garantizar que estos empleos sean de calidad, que se desarrollen en un ambiente diverso e inclusivo, y que otorgue reales oportunidades de crecimiento a quienes accedan a ellos», asegura Ruiz.
Para continuar trabajando en la brecha de género, Walmart ha asumido diferentes compromisos. Uno es contar con un 50% de mujeres en roles de liderazgo de acá al 2028. Para cerrar la brecha, explica Ruiz, se priorizará a las mujeres para encabezar las posiciones que se produzcan a raíz de las nuevas aperturas de tiendas, dando oportunidades al desarrollo interno e incorporando nuevos talentos en todas las regiones del país.
Paralelamente, desde el 2023 y junto con SENCE, Walmart lanzó el programa Avanza Mujer, cuyo objetivo es capacitar a 5.000 trabajadoras hacia el 2025, con el propósito de impulsar el desarrollo personal y profesional de sus equipos de operaciones.
«Este año hemos expandido el programa hacia todas las regiones de Chile donde operamos. En el caso de Concepción, por ejemplo, se certificarán más de 200 colaboradoras de la operación», detalla el ejecutivo.
Ruiz señala que todas las empresas pueden ser un gran aporte en materia de equidad de género, especialmente las extranjeras, ya que muchas de ellas cuentan con políticas avanzadas y experiencias en mercados donde la equidad está en niveles más avanzados.
«Estas compañías traen consigo prácticas globales, fomentan la diversidad y están comprometidas con estándares internacionales que promueven la igualdad de oportunidades para todos. Este intercambio de conocimiento y experiencias contribuye a mejorar las prácticas locales y a elevar los estándares en el país», sostiene.
“Lo importante es cambiar el sentido de responsabilidad de la inclusión al interior de las empresas, que no sea una solo una tarea de Recursos Humanos, sino que toda la empresa se haga responsable: gerentes, cada uno los colaboradores, clientes y comunidades. Es una oportunidad en la que todos y todas ganamos», finaliza.