La compañía estadounidense de co-work cuenta con cinco edificios en Santiago, los que ya superaron el 55% de ocupación y presentan una demanda que, desde WeWork, califican como “impresionante”.
La empresa estadounidense WeWork tiene cinco edificios en Chile. En todo el mundo posee más de 700 y, de ellos, 85 se reparten en los siete países de América Latina en que operan. El 2019 fue un año complejo, la compañía estuvo al borde de la quiebra y la pandemia les asestó otro duro golpe. Hubo que reducir personal y hacer un cambio en la estrategia de negocios.
Hoy WeWork apunta a un crecimiento rentable, retomaron la contratación de personal y siguen teniendo planes de expansión en la Latinoamérica y en Chile. Se declaran “agnósticos” de los temas políticos que viven los países, e incluso del cambio constitucional que se está desarrollando en Chile.
“El 2020 fue terrible para nosotros al principio de la pandemia, porque nos bajaron las ocupaciones de los edificios. No éramos conscientes de que esto iba a ser un acelerador para 2021, porque la forma de trabajar cambió y cambió a favor nuestro”, asegura Claudio Hidalgo, COO (director de operaciones) de la empresa para América.
El ejecutivo explica que los primeros meses de 2020 fueron muy duros, pero que desde enero de 2021 volvieron a crecer a una tasa radicalmente distinta a la que tenían antes de la pandemia. “Si nos ponemos a pensar cómo trabajamos, antes de la pandemia llevábamos 200 años trabajando de la misma forma. Todo eso cambió. Al principio fue muy duro, pero desde 2021 empezó a modificarse la forma de trabajo y volvió la gente a nuestros edificios. El 2021 logramos estabilizar el negocio y fue de tremendo crecimiento en América Latina”, precisa.
El país que tuvo el mayor crecimiento para WeWork fue Brasil, dado que fue el que tuvo menos restricciones por el Covid. Le siguió México, con un crecimiento muy rápido. En tanto, Chile fue el tercer o cuarto país en términos de crecimiento. “Los avances de la vacunación generaron una readecuación de la forma de trabajo y una vuelta al trabajo bastante más acelerada que el resto de los países”, explica Hidalgo.
El COO para América Latina señala que las grandes empresas se mantuvieron en casa, mientras que las pequeñas y medianas fueron las que más aceleraron la vuelta. “Nuestras ocupaciones están creciendo, ya tenemos más ocupación que antes de la pandemia”, asegura.
“A nivel global tenemos más de 700 edificios. En América Latina tenemos 85 edificios y estamos presentes en 7 países. Hoy estamos con una ocupación sobre el 70%, que es mejor que la que teníamos antes, y va creciendo todos los meses”, comenta Claudio Hidalgo.
En tanto, el plan de crecimiento de la compañía será diferente al que había previo a la pandemia y esperan que el 2023 sea un año marcado por una expansión en términos de ubicación. “Antes solo comercializábamos oficinas. Hoy tenemos un producto que se llama all access, que permite contratar un servicio con nosotros y tener acceso a los edificios 24/7. Ese producto permitió acelerar a otros segmentos que antes no estaban con nosotros”.
“El 2019 fue un tema más relacionado a los inversionistas de la compañía, que a la compañía como tal. En términos de calidad de servicio, lugares y members no tuvo ningún impacto. La marca no tuvo ningún impacto. Tenemos estudios de mercado donde la marca no se movió. Todo lo que se vio en prensa tenía que ver con las discusiones que había dentro de los distintos inversionistas, y la valoración que se le daba a la compañía”, explica el COO de WeWork.
En este sentido, señala que la estrategia en ese entonces era de crecimiento acelerado y que con la llegada del inversionista nuevo lo que se hizo fue cambiar esa estrategia hacia una de crecimiento rentable. “La pandemia nos permitió hacer una serie de cambios internos en la organización, para modificar toda nuestra estructura de costos, sin que tuviera un impacto en la experiencia de nuestros members”, asegura.
WeWork tiene presencia en Asia y es en ese continente donde enfrentaron los primeros impactos de la pandemia. A América Latina llegó 4 ó 5 meses más tarde con un impacto real. La experiencia al otro lado del mundo le permitió a la compañía tomar acciones inmediatas. “En vez de tener seis u ocho meses críticos de la pandemia, tuvimos tres o cuatro, porque logramos tomar acciones inmediatas dada la experiencia de Asia”, detalla Hidalgo.
“Sin duda nos pegó muy duro al principio. Los primeros meses teníamos un grado de incertidumbre alto. Dentro de la incertidumbre, alguna luz de esperanza teníamos por lo que iba pasando en Asia. Antes de la pandemia nuestras conversaciones comerciales era con la persona de administración de la empresa, pero en Asia eso empezó a desaparecer. En Asia empezó a llamar la gente de recursos humanos. En Latinoamérica pudimos cambiar la forma de comercializar”, agrega.
En el 2020 WeWork, que venía con una estrategia de crecimiento acelerado, dejó de abrir nuevos edificios. Así, ajustaron el tamaño de la organización, en línea con el cambio de estrategia de pasar de un crecimiento expansivo a un crecimiento rentable. “Ese cambio significó un reajuste de la estructura organizacional y salida de muchos talentos. De ahí en adelante nos hemos mantenido fieles a esa estructura. Durante 2021 logramos estabilizar la organización y hoy estamos activamente contratando para el modelo de negocios que tenemos actualmente. Hoy trabajan más de 700 personas en América Latina”, asegura.
El ejecutivo explica que la realidad financiera de WeWork es completamente distinta a la que tenían antes debido al nuevo modelo, pero que esperan ser rentables durante este año. Con el modelo de crecimiento acelerado anterior, las expectativas de pasar a ser rentables eran de muy largo plazo. “Con la transformación de la organización, hoy estamos aspirando a ser rentables este año, cosa que hace dos o tres años no era pensado”, indica.
En Chile, hubo un proceso de ajuste de portafolio de edificios durante 2020-2021. Actualmente, WeWork cuenta con cinco edificios en Santiago con sobre un 55% de ocupación. “La demanda que estamos viendo es impresionante. El tráfico se ha duplicado en los últimos seis meses en Chile. La gente está haciendo un uso más eficiente de los espacios. Nuestro foco en Chile es hacer rentables las ubicaciones que tenemos, y en 2023 nuestro foco es de expansión”, asegura Claudio Hidalgo.
Claudio Hidalgo, COO de la compañía señala que “la estructura de la organización es agnóstica a lo que está sucediendo políticamente en los países. Tenemos una diversidad de países en América Latina: tienes Perú, tienes Brasil, que pueden ser dos extremos distintos. No podemos determinar nuestra estrategia por países. Las vamos viendo con cómo evoluciona la forma del trabajo. Mientras la forma del trabajo y nuestra propuesta de valor tengan un match, vamos a seguir participando cualquiera sea el ambiente político que exista”.
“Va a seguir existiendo emprendimiento, crecimiento, empleo. Quizás van a cambiar las formas o tipos de trabajo, pero esto no va a parar”, asegura. En este sentido, precisa que “lo que nos interesa es que exista un ambiente propicio para el emprendimiento, que es donde están nuestros principales clientes. Y en casi toda Latinoamérica son un músculo muy importante de desarrollo. Mientras eso exista, vamos a seguir estando. Desde el punto de vista de lo que pueda decir la Constitución, somos muy agnósticos del resultado de eso”.
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Fuente: La Tercera