El país sudamericano encabeza la «Declaración de Santiago para promover una Inteligencia Artificial ética en América Latina y el Caribe», que reúne a 20 naciones en busca de una voz común para la regulación y gobernanza de la IA en la región.
En una reunión histórica celebrada en el Palacio de La Moneda, 20 naciones de América Latina y el Caribe se unieron para firmar la «Declaración de Santiago para promover una Inteligencia Artificial ética».
El evento, convocado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de Chile, marca un hito en el liderazgo de América Latina en la gobernanza de la IA.
El acuerdo convocó a ministros, ministras y encargados de las políticas digitales y de IA de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Jamaica, México, Perú, Paraguay, República Dominicana, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam, Uruguay y Venezuela.
La ministra Aisén Etcheverry, al frente de esta iniciativa, destacó la importancia de que América Latina se una como un bloque en las discusiones globales sobre la gobernanza de la IA.
El objetivo es garantizar que la región no solo se beneficie del poder de la IA, sino que también participe activamente en su desarrollo y toma de decisiones.
Cabe destacar que Chile es líder en Inteligencia Artificial en la región, posicionándose como una economía con un alto nivel de madurez digital, según reveló el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial (ILIA) en su primera edición.
Este índice, elaborado por el Centro Nacional de IA de Chile (CENIA) con el apoyo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), destacó al país por destacó por su infraestructura digital y de procesamiento de datos, así como la disponibilidad de dispositivos tecnológicos, revelo el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial (ILIA).
La "Declaración de Santiago" refleja la Recomendación sobre la Ética de la Inteligencia Artificial de la UNESCO y establece los principios fundamentales que deben guiar las políticas públicas sobre la IA.
Esto incluye la proporcionalidad, la seguridad, la equidad, la no discriminación, la igualdad de género, la accesibilidad, la sostenibilidad, la privacidad y la protección de datos, entre otros.
La iniciativa reconoce que los rápidos avances tecnológicos exigen una regulación que sea sensible a las necesidades y desafíos específicos de América Latina y el Caribe.
También hace hincapié en la importancia de la colaboración multisectorial, involucrando a empresas privadas, la sociedad civil, la academia y otros actores en el ciclo de vida de la IA.
En un paso significativo, se acordó establecer un Grupo de Trabajo para la constitución de un Consejo Intergubernamental de Inteligencia Artificial para América Latina y el Caribe, encabezado por Chile.
Este equipo se enfocará en fortalecer las capacidades regionales en materia de IA.
La "Declaración de Santiago" es un hito importante en el camino hacia la gobernanza ética de la IA en América Latina y el Caribe, y demuestra el compromiso de la región en dar forma a su futuro digital.
América Latina se posiciona como un actor clave en las conversaciones globales sobre la regulación y uso responsable de la Inteligencia Artificial.